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Sábado, 11 de julio de 2020

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san Benito


Isaías 6:1-8
Salmos 93:1-2, 5
Mateo 10:24-33

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¿quién soy?

“¡Ay de mí, estoy perdido! Porque soy un hombre de labios impuros, y habito en medio de un pueblo de labios impuros” (Isaías 6:5).


   Los seres humanos, especialmente los cristianos, a menudo tienen crisis de identidad. Pero somos mucho más de lo que nos percatamos. Jesús incluso se sintió obligado a asegurar a Sus discípulos que valían más que muchos gorriones (Mt 10:31). Los discípulos de Jesús deben haber estado experimentando una crisis de identidad si no estaban seguros de que valían más que unas pocas aves.
   Para ayudarnos a realizar nuestra identidad bautismal dada por Dios, el Señor nos da llamadas. Por ejemplo, Abraham, Moisés, Samuel, Saúl, David y muchos otros fueron llamados por Dios cuando tenían muy poca idea de quiénes eran. Estas llamadas les ayudaron a darse cuenta de sus identidades. Cuando el Señor llamó a Isaías, el futuro profeta dio grandes pasos para encontrar su identidad profética (Is 6:1ss).
   ¿Cuáles son tus llamados de Dios, es decir, tus vocaciones? Si somos bautizados, somos hijos e hijas de Dios. Este es el más grande de todos los llamados. Entonces somos llamados a vivir nuestra hermandad bautismal. También somos llamados a ser solteros para el Señor. Esto es, o temporal y lleva al matrimonio, o permanente. La mayoría de las personas están llamadas a la vocación laica. Algunos son llamados a las vocaciones sacerdotales o religiosas. Algunos son llamados a ser padres y formar una familia. También hay muchas otras llamadas de Dios, como el diaconado, la viudez, el cuidado de desvalidos a tiempo completo. Vivamos nuestros muchos llamados con fidelidad y generosidad. Entonces llegaremos a conocernos.

Oración:  Padre, renueva mi Confirmación en el Espíritu Santo. Entonces úsame para liberar a otros de sus crisis de identidad.

Promesa:  “Yo oí la voz del Señor que decía: ‘¿A quién enviaré y quién irá por nosotros?’. Yo respondí: ‘¡Aquí estoy: envíame!’” (Is 6:8).

Alabanza:  San Benito es una figura imponente en la historia de la Iglesia. Ayudó a re-cristianizar Europa después de la herejía Ariana. El Papa san Pablo VI le dio el título "Patrono de Europa".

Referencia:  

Rescripto:  Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de junio al 31 de julio de 2020. Otorgado el 22 de octubre de 2019. Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati

El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.